Luego de 6 años de workoholismo puro gracias a Camote Soup y a mi blog, he llegado a la conclusión que no es nada aceptable el perder tu vida social por el trabajo. Han sido varios años trabajando para mí misma con la idea de “El trabajo es primero”, dejando de lado hobbies, amigos, familia, salidas…Y eso al final de todo te convierte en una persona que puede ser vista como alguien que se esfuerza mucho por lograr lo que quiere, un buen ejemplo de emprendedurismo, etc, pero, ¿Qué queda detrás de todo eso? Lo mejor es mantener un equilibrio en las actividades que realizamos, nunca dejar de lado a las personas que te quieren y principalmente, no olvidarse de uno mismo. Nútranse de todo, de viajes, conversaciones, libros, películas, música, baile, errores…Que a veces cuando nos metemos con todo y sin importar nada más en nuestro trabajo, terminamos (Muy capos en nuestro campo, está claro) pero al mismo tiempo dejando de vivir muchas experiencias que nos podrían hacer más grandes aún.
Great pair of jeans 🙂